LAS EXPERIENCIAS EDUCATIVAS NOS COMPLEMENTAN

La educación es un tema del que todos hablamos, muchos la cuestionamos, varios asumen que es la respuesta a muchas preguntas o que es hasta la solución a todos los problemas.

Y sí, la educación es indispensable.

Por esto, existen las instituciones educativas que proponen metodologías, existen teorías resultado de investigaciones profundas sobre los niños que nos dan pistas del patrón que podríamos llamar “común” que debe seguir el desarrollo infantil, pero no te afanes si el niño que ves no lo sigue, estas pueden variar según su ritmo de aprendizaje y la experiencia de vida de quien lo eduque.

En el oficio de estudiar el arte de educar esta bien, es necesario, es la guía y la base para quienes ejercen la función de la pedagogía, pero para las personas a quienes la vida les dio la labor de educar solo estaría bien si en algún punto todos fuéramos iguales, aprendiéramos igual y viviéramos una realidad semejante. Como no es así, cada uno de nosotros vino a este mundo a vivir su propia realidad y a desenvolverse según sus posibilidades, a raíz de esto, cada ser tiene una versión que contar sobre lo que es la educación, ya que así como no hay dos gotas de lluvia que caigan en el mismo lugar, no hay dos seres humanos que tengan un mismo cuento de vida por narrar.

Como lo expresa el dicho popular, “ninguno de nosotros nació aprendido”, cada uno ha tenido que vivir su experiencia educativa de manera muy propia y así como una variedad de adultos ya lo hicieron, en este preciso instante hay niños que lo están viviendo y será nuestra responsabilidad hacer de esa educación que ellos reciben, la mejor.

En esta educación más personal, más de corazón a corazón, genuina y desinteresada que debemos fortalecer, es importante comprender que uno no se las sabe todas, a medida que pasa el tiempo y a medida que los niños van creciendo, así como ellos, nosotros también aprendemos. ¿Y lo hacemos como?, en el pasar de los días, ya con el problema encima, pidiendo consejos, leyendo libros, haciendo la llamada a un amigo y podría nombrar varias opciones más sin previsión de terminar rápido, y lo que nos digan que podemos hacer lo hacemos y si no funciona, en la practica modificaremos la recomendación y la acomodaremos a la situación.

Lo mágico de esto, es comprender que el tesoro esta en saber que nadie posee una verdad absoluta frente a la educación y son tantos los puntos de vista y tantas las experiencias, que sería egoísta pensar que no nos complementamos entre todos, ¡claro que si!, hay algo en la experiencia del otro que con seguridad va a aportar a la nuestra y habrá algo en nuestra experiencia que aportará a la de los demás, en este caso aportará en la búsqueda por encontrar la manera más óptima de proporcionar una educación de calidad para quienes nos siguen.

Les recuerdo que no hay dos niños iguales, hay niños con personalidades, competencias, habilidades, aptitudes y actitudes diferentes, por lo tanto si somos sensibles ante las formas de expresión de los demás, con seguridad habrá una intención que se conecte con nuestra necesidad inmediata y esa será la que optemos por poner en practica y serán ustedes mismos los que descubrirán si ha sido útil o no. ¡Apuesto a que si!, así que bienvenida, la opinión, la sugerencia, el consejo, el halago, el comentario, el emoji y hasta el gyf, todo esto nos enriquece y nos hace recorrer un camino hacia una educación mas consciente.

Daniela Escobar Florez.